Por: Dr. Camilo Alfonso Escobar Mora ©

Fundador de JURÍDIA – Centro de Enseñanza e Investigación de Derecho Preventivo del Consumo en la Publicidad Digital

www.juridia.co

 

En nuestra teoría de derecho preventivo del consumo en la publicidad digital (la) metodología significa la forma que hace que exista el caso válido (jurídicamente). Es decir, es la forma de definir y, en general, de hacer cada caso de una forma que coincida con la forma en la que le aplica el derecho.

 

Por eso, la metodología no es una camisa de fuerza. No es un formalismo negligente (ni doloso, según el caso). No es una arbitrariedad. Es la forma en la que el caso se pueda hacer y, en definitiva, se haga el caso válido jurídicamente (en el caso, según el caso y a la medida del caso).

 

Entonces, no se trata de una ilusión inválida de conocimiento y/o de validez (jurídica). Se trata de una forma en la que exista el conocimiento y, en general, la teoría y la práctica que hace el caso válido.

 

Por eso, no se trata de una metodología rígida que trate de hacer o que sea considerada como la forma que hace el caso válido. Se trata de hacer la metodología bajo las formas que hagan que el caso sea (incluido: vaya siendo y se mantenga) válido jurídicamente.

 

Por eso, la metodología válida (jurídicamente) es la metodología diligente (jurídicamente). Es decir, la que hace que en el caso exista el goce de los derechos y el cumplimiento de los deberes que le proceden. Gracias a la actuación diligente (por medios directos humanos y/o no humanos —los cuales indirectamente siempre son humanos al relacionarse con la conducta humana—, analógicos y/o digitales, según el caso) de cada ser humano involucrado en el caso.

 

Porque la diligencia es la forma de atender (cumplir) el derecho de la forma en la que le aplique a cada persona (física —natural— o moral —jurídica—) existente en un caso a la medida de su perfil jurídico (de su condición jurídica) a la medida del caso.

 

Entonces, la metodología diligente es la (forma) que hace que se conozca el ser del caso y la forma en la que le aplica el derecho y (que hace) que esa forma de existencia del derecho se atienda a la medida del caso para que el caso coexista con el derecho (a la medida de su ser).

 

Por eso, el caso que lo logra es el caso válido (jurídicamente). Gracias a la metodología diligente (jurídicamente). Creada (incluido: retroalimentada) a la medida de cada caso.